El estado actual del Palacio de Olite es fruto de
una restauración de los arquitectos José y Javier Yárnoz tras ganar un concurso
en 1923 de la Diputación de Navarra que comenzó a materializarse en 1937,
pero no todos los proyectos apostaron por una reconstrucción en esta línea,
sino más de mantenimiento de las ruinas, como reprodujo en esta imagen la
revista La Esfera de Madrid. Daniel Mont-Blanc firmó un reportaje, ilustrado
con fotos y algunas propuestas de reparación, que apareció con el título
“Reliquias históricas, el castillo real de Olite”.