La reina de Francia y sus damas llegan a Navarra |
“Trabajos de amor perdidos”, una obra temprana y poco
representada de William Shakespeare, cerró el sábado, por este año, el Festival
de Olite en La Cava, una edición desigual en programa y alejada dirección del
certamen, si ha existido.
La comedia,
un trabajo menor del bardo inglés desaparecido hace 400 años, cuenta la historia
ficticia de un rey de la Navarra ya conquistada, posiblemente ambienta en la
corte de Pau hacia 1595, que se recluye en un castillo que no puede ser el de
Olite, pero que como escenario de la trama no tiene un parangón que ya
advirtieron sabiamente en abril los del Globe Theatre de Londres con su
proyecto cinematográfico “The complete walk”, que también se ha visto en la
Placeta olitense y en el Baluarte de Pamplona.
Con un
plantel de actores que se desenvuelve bien en las pantallas de la telenovela
española, la representación de La Cava resultó entretenida y su larga duración,
incluso, se hizo corta. Navarra iba a ser “admiración del mundo” por un alarde
de castidad que se revela imposible. La casuística provoca, en ocasiones, una
risa floja, como la acústica del escenario que hay que mejorar para la próxima
edición del festival, que en Olite cobra una magia poco comparable.