Todos los grupos municipales de Olite/Erriberri (Agrupemos, Nav + y PSN) han apoyado una declaración institucional del Ayuntamiento que pide “una Sanidad digna en la Navarra rural” que salve la “brecha” que se ha abierto en algunos pueblos y reclama, entre otras cuestiones, que el departamento de Salud reponga el servicio de urgencias nocturnas suprimido en la localidad y revierta los recortes en los consultorios de Beire y Pitillas.
En el transcurso del Pleno celebrado el viernes los grupos aprobaron unánimemente una moción en la que exigen al Gobierno de Navarra que haga “una apuesta real por la Atención Primaria”, más en estos tiempos de pandemia, y mostraron su solidaridad con la Plataforma por una Sanidad rural digna que se concentra delante de los centros de salud y que, tras un breve parón, retoma su actividad la próximo miércoles (12 h).
En el documento acordado instan al departamento de Salud a dotar de plantillas necesarias y estables al ámbito rural, facilitando su asentamiento sin rotación, y a consolidar sin excusas un servicio de pediatría como pilar contra la despoblación.
Los firmante, además, exigen al Gobierno de Chivite que tenga en cuenta que el desarrollo rural pasa por mantener los servicios públicos, como el sanitario, “una inversión de futuro para la vertebración y la cohesión de nuestra Navarra”, según señala la declaración aprobada en Olite/Erriberri y que después se presentará en otros ayuntamientos afectados por los recortes.
La moción recuerda que con la crisis económica de hace diez años los servicios públicos, y no solo sanitarios, comenzaron a deteriorarse en el medio rural y se tradujo, por ejemplo, en una reducción de los trasportes públicos (cierre de la estación de tren de Tafalla), un deterioro de las carreteras, servicios sociales o consultorios.
La declaración recuerda que cuando comenzaba a remontar la crisis llegó la pandemia de covid, que ha profundizado en “la brecha sanitaria que se percibe”, con la escasez y sobre esfuerzo de profesionales, malas infraestructuras de comunicación entre los pueblos o deficiencias graves en servicios como el de pediatría rural.
“El año pasado congelamos la tasas por la inundaciones, pero este año la situación ha ido económicamente a peor con la pandemia”, justificó la Alcaldesa Maite Garbayo, a la vez que destacó el esfuerzo para congelar las tasas del cementerio, apertura y traspasos de locales comerciales, cine o emisión de copias. El uso del frontón incluso baja, subrayó la mandataria.