Las bandas menores de las escuelas de música de Olite/Erriberri y Milagro volvieron a llenar el sábado la magnífica Casa de Cultura de esta última localidad, en un concierto conjunto que reunió sobre el escenario a más de cien chavales dirigidos por Natxo Ongay.
Como
en la actuación primera de Olite, también hubo un momento de homenaje a los
ayuntamientos que promueven las escuelas municipales donde los jóvenes aprenden a tocar sus instrumentos. Dos autobuses con los miembros de las bandas
y acompañantes olitenses se desplazaron hasta el municipio de las cerezas, en
el que se unieron otros vecinos que acudieron en coches.