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El nombre de Azcárate esculpido en el mámol |
El mausoleo que recuerda en el cementerio de Olite/Erriberri
a los republicanos muertos tras el golpe de estado del 18 de julio de 1936 tiene
dos grandes placas de mármol con medio centenar de nombres a los que estos días
se ha sumado uno nuevo en memoria de Custodio Azcárate Araiz, de 56 años, asesinado violentamente en su huerta en 1938.
El nombre
de este labrador progresista ha sido añadido a una lista de la que se cayó hace
39 años, cuando se inauguró el panteón en una multitudinaria ceremonia. El
grupo memorialista local ha encargado ahora a un artesano tallar en la losa la
identidad de quien, según los testimonios, murió casi dos años después que el
resto de sus vecinos represaliados.
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Foto del "Catato" disfrazado con frac |
En la tumba
del camposanto estaban, hasta ahora, los nombres de 46 olitenses asesinados en
las cunetas entre julio y octubre del 36, los meses más sangrientos, así como
otros tres paisanos más que murieron en zona republicana. En total 49 vecinos,
entre ellos siete cargos electos del Ayuntamiento republicano (dos alcaldes y
cinco concejales).
Azcárate, sin embargo, falleció dos
años después, con la guerra avanzada y cuando en Olite/Erriberri las
autoridades golpistas habían acantonado tropas de descanso. Fue precisamente un
soldado “nacional” el que, según las fuentes, acabó con la vida del olitense en
su caserío/huerta cercano a la presa del río Cidacos en unas circunstancias en
las que la justicia franquista no profundizó, al menos públicamente.
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Dantzari junto al mausoleo republicano |
Custodio
Azcárate, conocido como el “Catato”, no fue un vecino común. En su huerta, por
ejemplo, prestó un primer refugio a una veintena de republicanos del pueblo que
huyeron tras el “Alzamiento” militar, según el perfil que en 2012 escribió
precisamente en el Olitense el veterano cronista local Ángel Jiménez Biurrun,
también pionero en la recuperación de la memoria histórica municipal.
Azcárate,
cuya identidad sí aparece en la placa que se colocó en la fachada del
Ayuntamiento en 2016, fue un hombre soltero, con una familia sin muchos
problemas, que hizo fortuna en Argentina. A la vuelta de la emigración, compró
cerca del río un gran caserío con huerta en el que, a veces, organizaba juergas
con sus amigos de la cuadrilla “La Vasca”.
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Caserío/huerta donde fue asesinado |
Hombre con sentido del humor, Custodio solía disfrazarse de sobrero de copa y frac para
acompañar al quinteto de músicos con el que junto a sus amistades frecuentaba
las fiestas de los pueblos de la merindad. Apodado el “Catato” porque le había
criado una tía de San Martín de Unx, el carácter abierto que exhibía conectaba con
la personalidad de su padre, el exalcalde Galo Azcárate, al que hasta la
transición estuvo dedicada la Plaza mayor del pueblo (hoy Carlos III el Noble)
en reconocimiento a la defensa del comunal que en el siglo XIX hizo para que
revertiera al municipio tras una inicial privatización.