El 2013, en general, no ha sido un buen año para casi nadie.
Se le despacha con prisa, de un puntapié hacia delante, a la espera de que el
nuevo tiempo toque el fondo de la crisis y, en lo posible, repunte algo un optimismo
que traiga, sobre todo, empleo. También a Olite, donde los recortes se notan
más debido a la gruesa deuda municipal. La subida de impuestos limará, lentamente
y a largo plazo, los números rojos a cuenta de los bolsillos de los sufridos contribuyentes,
a los que no se les engaña ni aumentando un día más las fiestas patronales. Estas
son algunas noticias destacadas de un agónico 2013 que ya es historia... (Ver más)