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| Enlace Príncipe de Viana y Agnes de Kleve |
Los novios
desfilaron bajo palio desde el cercano Palacio Real hasta el templo mientras
volteaban las campanas y en toda la localidad sonaban timbales y trompetas,
según cuentan las crónicas. La fiesta duró tres días en los que hubo grandes
banquetes y torneos de caballeros.
El enlace
había levantado expectación en Navarra y también en Borgoña, de cuyo rico duque
era sobrina la novia. No se escatimaron gastos y, por ejemplo, las cortes
aprobaron una partida extraordinaria de 15.000 florines para nuevas vestimentas o decorar el castillo olitense.
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| Reproducción, Sánchez Montes |
Borgoña,
uno de los ducados más ricos e influyentes de Francia, había ofrecido por su
princesa el pago de una dote de 160.000 libras en monedas de oro, toda una
fortuna para quien prometía ser en un futuro cercano la nueva reina de Navarra,
si bien el destino torció el vaticinio al no lograr descendencia y entrar en
desgracia el Príncipe de Viana al enfrentarse a su padre Juan II de Aragón, que
finalmente usurpó la corona.
Pero antes
de su muerte prematura también en Olite en 1448, nada hacía presagiar aquel
comienzo del otoño de hace 580 años que la desgracia acecharía a quien entraba en
Navarra acompañada por un séquito de cerca de 90 personas, entre ellas la flor
de la nobleza gala. Dos carabelas habían llegado por mar al puerto de Bilbao con la
comitiva, que fue escoltada por otros 70 navarros encabezados por Juan
Beaumont, mentor del Príncipe, hasta Estella, donde los novios se vieron por
primera vez para luego desplazarse al Palacio de Olite.
